El documento elaborado al término de la CRES+5, la reunión de seguimiento de la III Conferencia Regional de Educación Superior celebrada en 2018, tiene como una de sus premisas la lucha contra la mercantilización y privatización de los sistemas educativos en todos sus niveles, así como la promoción de controles para evitar esta tendencia. La declaración defiende la educación como un bien público y no como una mercancía, y tiene como objetivo el desarrollo sostenible de la región de América Latina y el Caribe.

La declaración de la CRES+5 también contiene compromisos que deben perseguirse para construir un nuevo modelo educativo: es necesaria la equidad y la formación de las personas a lo largo de toda su vida; los estudiantes son el eje central de nuestro trabajo, ya sea en el ámbito docente, de investigación, institucional o social, pues representan el futuro de nuestras comunidades y encarnan lo más valioso de nuestra identidad y diversidad; la integración regional con un cambio en las condiciones en que se dan las relaciones interregionales y globales; una perspectiva descolonizadora debe estar en el centro de la conciencia latinoamericana y caribeña; expresamos nuestra convicción en emprender acciones colectivas entre gobiernos, sociedades e instituciones de educación superior, ciencia y tecnología, que actúen a favor de acuerdos de cooperación horizontal y solidaria, la promoción y coparticipación de buenas prácticas.

El documento avala la validez de las instituciones de educación superior como un espacio valioso para la construcción de un futuro promisorio basado en la ciudadanía plena, la justicia social, el desarrollo sostenible y la integración regional. Por último, con el fin de promover la integración regional, los representantes recomiendan a los Estados que ratifiquen tanto el Convenio Regional como el Convenio Mundial sobre Reconocimiento de Cualificaciones de Educación Superior.